lunes, 26 de enero de 2009


La vida de cubito de hielo siempre había sido plácida, serena, silenciosa, blanca.
Hasta el día en que descubrió que junto a su cubitera descansaba otro cubito de hielo en forma de corazón.
Inmediatamente, supo que existían el rojo, el sol y las mariposas. Los atardeceres y los amaneceres, la música de Beethoven y los abrazos.
Pero claro, ninguna de estas cosas se guarda en el congelador.

9 comentarios:

color lili dijo...

Creo que Cubito de hielo sintio su corazon romperse al rellenar el vaso y sentir llegar a sus ultimos minutos de existencia.
Un cubito de hielo se puede ahogar ?

Alberto Ramos dijo...

Creo que sólo se ahogan 9 décimas partes.

Soldado Raso dijo...

Es cierto... hay que derretirse para disfrutar todas esas cosas.

El taller de Curra - Cartonnage dijo...

Me ha encantado..!

ariadna dijo...

¡Gracias Curra! :)

Anónimo dijo...

pechocho! y no...esas cosas es imposible que se queden congeladas...salu2 desde Urguguay!!!;)

gustavo zuritz dijo...

Hola Ariadnalaloca!!
Buscando locos/as lindas/os,mis ojos se tomaron vacaciones en el mágico corazón de hielo que se derrite en tu vaso, ojalá esas gotas de agua se evaporen y formen pequeñas nubes rosadas que hagan llover locuras sobre tantos corazones vacíos de sueños y aventuras. Iré volviendome cuerdo de a poquito mirando sin tiempo tus locuras, Y desde ya te cuento que voy a agregarte en mi blog.

Saludocos
Gustavo

ariadna dijo...

Gracias y bienvenido, Gustavo. A ver si con tus visitas nos animamos a publicar más... :)

David Cotos dijo...

una gran verdad, que tal suerte la de ese cubito de hielo.